SANTIAGO 3-10 De una
misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.
En el transcurso de nuestro diario vivir nos encontramos con personas que en cada
palabra que comparten el 90% son vulgares, maldicientes e hirientes; más alarmante es que aun en personas que dicen ser hijos de Dios salgan palabras profanas, vulgares y de un tono inapropiado.
Muchas de las razones por las cuales las personas caen en ésta
clase de vocabulario es para liberar su
extrema frustración con una situación que no son capaces de enfrentar, han desarrollado un patrón impío para
expresar su displacer y necesitan reeducar sus respuestas,
Si
hemos caído en esta condición miremos lo que dice Lucas 6:45
El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo que es bueno; y
el {hombre} malo, del mal {tesoro} saca lo que es malo; porque de la abundancia
del corazón habla su boca.
En este tiempo debemos examinar lo que este entrando en nuestro corazón, si
tenemos alguna raíz de amargura que aflora en situaciones extremas y/o si estamos compartiendo con personas maldicientes por lo que podemos estar adquiriendo malas expresiones.
Hoy es un tiempo de hacer un alto en el camino
y examinar lo que está aflorando de
nuestro corazón a través de nuestra boca, como estamos respondiendo y que patrones hemos
adquirido y no lo habíamos
identificado en nuestra manera de hablar, al igual buscar rodearnos de personas sabias y prudentes.
Recuerda que las palabras son pensamientos verbales y
debemos practicar la disciplina mental, no permitir pensamientos que nos hagan decir palabras de maldición,
practicar usar palabras que traigan vida
a nuestro espíritu y a los demás
Colosenses 4:6 Que vuestra conversación sea siempre
con gracia, sazonada {como} con sal, para que sepáis cómo debéis responder a
cada persona.
AFIRMACION DE HOY
Hoy
le concedo a Dios el cuidado completo de mi lengua: Por su gracia solo hablaré
palabras que traerán honor a su nombre.
ORACIÓN
Dios hermoso hoy te presento mis pensamientos, palabras y obras, te pido Señor Ayúdame sacando las malas palabras de mi corazón y reemplazalas con tus expresiones de amor. Te agradezco por adelantado el perdonarme por este tipo de vocabulario y por permitir que las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón sean aceptables delante de ti, ayúdame Dios que mi boca sea una fuente de agua limpia. En el nombre de Jesús. Amén amen
Dios hermoso hoy te presento mis pensamientos, palabras y obras, te pido Señor Ayúdame sacando las malas palabras de mi corazón y reemplazalas con tus expresiones de amor. Te agradezco por adelantado el perdonarme por este tipo de vocabulario y por permitir que las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón sean aceptables delante de ti, ayúdame Dios que mi boca sea una fuente de agua limpia. En el nombre de Jesús. Amén amen
Gracias, por ésta serie de devocionales, que nos instruyen....
ResponderEliminarMuchas gracias por sus palabras de edificacion para mi vida
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